ninos rodeando a jesus en la biblia

Qué significa «Dejad que los niños vengan a mí» en la Biblia Católica

✅Significa que Jesús invita a los niños a acercarse a Él, simbolizando la pureza, inocencia y el valor de la fe sencilla en la Biblia Católica.


La frase «Dejad que los niños vengan a mí» proviene del Evangelio de Mateo 19:14 en la Biblia Católica, y expresa la importancia de la pureza, inocencia y humildad de los niños en el Reino de Dios. En este contexto, Jesús está enseñando a sus discípulos y a la multitud que los niños poseen cualidades que son esenciales para entrar en el Reino de los Cielos.

Este pasaje se utiliza para enfatizar que la fe y la relación con Dios deben ser simples y sinceras, como la de un niño. A continuación, analizaremos el contexto bíblico de esta frase y su significado en la doctrina católica, así como su aplicación en la vida cotidiana de los creyentes.

Contexto Bíblico

La frase completa se encuentra en el Evangelio de Mateo 19:13-15, donde dice:

Entonces le fueron presentados unos niños para que pusiese las manos sobre ellos y orase; y los discípulos les reprendieron. Pero Jesús dijo: Dejad a los niños venir a mí, y no se lo impidáis; porque de los tales es el reino de los cielos. Y habiendo puesto sobre ellos las manos, se fue de allí.

Significado Doctrinal

En la doctrina católica, este pasaje tiene varios significados profundos:

  • Pureza e Inocencia: Los niños representan la pureza y la inocencia, cualidades que son valoradas en el Reino de Dios.
  • Humildad: Los niños son humildes y dependientes, lo que refleja la actitud que los cristianos deben tener hacia Dios.
  • Fe Sincera: La fe de un niño es genuina y no está contaminada por dudas o escepticismo, lo que se espera de los creyentes.

Aplicación en la Vida Cotidiana

Los católicos pueden aplicar este pasaje en su vida cotidiana de varias maneras:

  1. Valorando la Infancia: Reconociendo y respetando la importancia de los niños en la comunidad y en la iglesia.
  2. Imitando la Fe Infantil: Adoptando una actitud de humildad y confianza absoluta en Dios, similar a la de un niño.
  3. Educación en la Fe: Enseñando a los niños sobre Dios y la fe desde una edad temprana.

La frase «Dejad que los niños vengan a mí» es una poderosa enseñanza de Jesús que resalta las cualidades esenciales para entrar en el Reino de Dios y sirve como guía para los creyentes en su relación con Dios y en la educación de sus hijos en la fe.

Contexto histórico y cultural de la frase en la Biblia

Para comprender plenamente el significado de la frase «Dejad que los niños vengan a mí» en la Biblia Católica, es fundamental analizar el contexto histórico y cultural en el que se menciona esta enseñanza de Jesús.

En la época en la que Jesús vivió, los niños no tenían el mismo estatus social y valor que en la actualidad. Eran considerados como seres vulnerables, dependientes y sin poder. Por lo tanto, cuando Jesús hace esta declaración, está desafiando las normas culturales de su tiempo y mostrando un profundo respeto y amor por los más indefensos de la sociedad.

En la cultura judía, los niños no eran considerados como sujetos de enseñanza religiosa, ya que se les veía como incapaces de comprender la Ley y las tradiciones. Sin embargo, Jesús rompe con esta concepción al invitar a los niños a acercarse a él, reconociendo su pureza de corazón y su capacidad de recibir el mensaje del Reino de Dios con humildad y fe.

Este pasaje bíblico se encuentra en varios evangelios, como en el Evangelio de Mateo 19:14, donde Jesús dice: «Dejad que los niños vengan a mí, y no se lo impidáis; porque de los tales es el reino de los cielos». Esta enseñanza resalta la importancia de la sencillez, la inocencia y la confianza que caracterizan la actitud de un niño hacia Dios.

En la actualidad, esta frase sigue siendo relevante y desafiante para los creyentes, recordándoles la necesidad de acoger a los más vulnerables y humildes, y de mantener una fe sencilla y confiada en Dios, tal como lo haría un niño.

Interpretaciones teológicas de «Dejad que los niños vengan a mí»

En la Biblia Católica, el pasaje que menciona «Dejad que los niños vengan a mí» se encuentra en el Evangelio de Mateo, capítulo 19, versículo 14. Este versículo ha sido objeto de diversas interpretaciones teológicas a lo largo de la historia del cristianismo.

Una de las interpretaciones más comunes de este pasaje es que Jesús estaba resaltando la importancia de la pureza e inocencia que caracterizan a los niños. Al invitar a los niños a acercarse a Él, Jesús estaba enseñando que el Reino de los Cielos pertenece a aquellos que se asemejan a los niños en su humildad y sencillez.

“En verdad les digo que si no cambian y se vuelven como niños, no entrarán en el Reino de los Cielos” (Mateo 18:3).

Otra interpretación importante es que este pasaje destaca la importancia de la fe y la confianza en Dios que caracterizan a los niños. Jesús invita a todos a acercarse a Él con la misma fe pura y confianza que un niño tiene en sus padres, demostrando así la necesidad de una relación de dependencia y entrega a Dios.

Beneficios de acoger a los niños en la enseñanza religiosa

Acoger a los niños en la enseñanza religiosa no solo cumple con el mandato de Jesús en este pasaje bíblico, sino que también aporta grandes beneficios a la comunidad de creyentes. Algunos de los beneficios incluyen:

  • Renovación espiritual: La presencia de niños en la comunidad cristiana puede traer una renovación espiritual y una visión fresca de la fe, recordando a los adultos la importancia de la simplicidad y la espontaneidad en la relación con Dios.
  • Transmisión de la fe: Al acoger a los niños en la iglesia y en la catequesis, se les brinda la oportunidad de crecer en la fe y de aprender los valores cristianos desde una edad temprana, facilitando así la transmisión generacional de la fe.
  • Comunidad inclusiva: La presencia de niños en la iglesia promueve una comunidad inclusiva donde personas de todas las edades y etapas de la vida son bienvenidas y valoradas, fomentando la unidad y la diversidad en la comunidad de creyentes.

La invitación de Jesús a “Dejad que los niños vengan a mí” en la Biblia Católica va más allá de un simple gesto de cariño hacia los más pequeños, representa un llamado a vivir la fe con la pureza y la confianza de un niño, reconociendo la importancia de acoger a los niños en la comunidad de creyentes para fortalecer la fe y construir un futuro sólido en la iglesia.

Preguntas frecuentes

¿Qué significa «Dejad que los niños vengan a mí» en la Biblia Católica?

Esta frase se encuentra en el Evangelio de Mateo y hace referencia a la importancia de la pureza e inocencia de los niños para acercarse a Dios.

¿Por qué Jesús menciona a los niños en este pasaje bíblico?

Jesús utiliza a los niños como ejemplo de humildad, confianza y sencillez que deben tener aquellos que desean entrar en el Reino de los Cielos.

¿Qué enseñanza podemos extraer de esta cita bíblica?

La importancia de acoger a todos con amor y sencillez, sin prejuicios ni discriminación, siguiendo el ejemplo de Jesús.

Puntos clave sobre «Dejad que los niños vengan a mí»
1. Jesús destaca la importancia de la pureza e inocencia de los niños.
2. Los niños representan la humildad, confianza y sencillez necesarias para acercarse a Dios.
3. La cita invita a acoger a todos con amor y sin prejuicios, siguiendo el ejemplo de Jesús.

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